Un día cualquiera, por una carretera secundaria cualquiera decido seguir la indicación de "poblado minero" y ahí aparecen esa veintena de edificios como surgidos de la nada que conforman el poblado minero de "El Arteal".
El de "El Arteal", es uno de los poblados que forma parte del legado de la actividad minera que perduró en la provincia de Almería hasta finales de los años 50, momento en el que se abandonó definitivamente la explotación subterránea de las minas.
Resulta apasionante recorrer sus calles y adentrarse en las casas que en otros tiempos estuvieron llenas de vida y que hoy luchan a duras penas contra el paso del tiempo.
No es difícil dejar volar la imaginación para pensar como se desarrollaría la vida de los mineros en esta pequeña ciudad.
En definitiva, un bonito, tranquilo y apartado lugar en el que perderse y pasear alejado del bullicio cotidiano.
Recuerdo aquella tarde como una tarde mágica, en la que Sara corría entre ruinas sin ser consciente de que pisaba por las vidas que vivieron otros hace más de 50 años. Tú hacías fotografías a lo lejos, mierntras yo vigilaba en la distancia el sueño de Pablo...
ResponderEliminarPues yo estuve viviendo desde el año 1954 hasta el año 1962, y de verdad que había muchísima vida.
ResponderEliminarPues yo estuve viviendo desde el año 1954 hasta el año 1962, y de verdad que había muchísima vida.
ResponderEliminar